36 familias con discapacidad y de escasos recursos económicos recibieron canastas de alimentos.
Ibarra. Arroz, azúcar, papas, fréjol, aceite, choclos y verduras son parte de los alimentos que conforman la canastilla solidaria que el Patronato Provincial de Imbabura entregó el pasado miércoles a 36 familias con discapacidad y de escasos recursos económicos de los barrios de Ibarra.
En lo que va del año se ha realizado la entrega de 80 canastillas solidarias en los diferentes barrios y sectores rurales de la provincia de Imbabura, la donación de alimentos se lo puede llevar a cabo gracias a la colaboración de instituciones, personas particulares y pequeños productores.
En esta ocasión la entrega de los alimentos se lo realizó con el apoyo de padres de familia, estudiantes y autoridades de la Unidad Educativa San Francisco, quienes realizaron un evento de reciclaje de botellas plásticas logrando recaudar fondos para adquirir los alimentos.
“Trabajamos siempre viendo las necesidades de los demás, como padres de familia debemos dar ejemplo de solidaridad a nuestros hijos”, dijo Jaqueline Rivas, representante de la pastoral de la Unidad Educativa San Francisco.
Pablo Jurado, Prefecto de Imbabura, felicito las alianzas con diferentes actores de la sociedad para poder realizar esta ayuda solidaria, recalcó que los productos no son importantes por el costo que tienen, sino por el valor que esto representa para las familias y más aún cuando viene del corazón de estudiantes y jóvenes.
“Vamos construyendo nuevos ciudadanos solidarios, participativos y sensibles al dolor de gente que muchas veces no tienen para comprar lo más básico, no miremos esta actividad como caridad, veámosla como un acto de solidaridad, cuenten siempre con nosotros”, dijo la autoridad provincial.
La alegría era notoria en los beneficiarios, pues los alimentos servirán para toda la familia que en la mayoría de los casos está conformada por cuatro o más personas entre niños, adolescentes y adultos mayores.
“Esta es una gran ayuda que nos brindan a las personas que estamos enfermas y que muchas veces no tenemos ni para comprar un pan, gracias a las autoridades que en verdad se preocupan por los más necesitados”, dijo Flor Paredes, del barrio la Cruz Verde y una de las 36 familias beneficiarias.
Teresa Carrera, presidenta del Patronato Provincial de Imbabura, manifestó que lo más gratificante de la ayuda social es mirar el rostro de alegría de cada una de las personas beneficiarias, “nos sentimos satisfechos ayudando a las familias que más lo necesitan, el cariño de los imbabureños es grande y sincero, por eso invito a más personas, organizaciones y empresas a unirse en esta noble causa”, indicó Carrera.